Omega dice de sí misma: "... Nuestro espíritu pionero nos ha llevado a la luna, nos ha ayudado a conquistar las profundidades del océano y nos ha hecho el cronometrador de los eventos deportivos más importantes del mundo. ¡Al mismo tiempo, siempre hemos establecido nuevos récords de precisión y hemos redefinido constantemente la relojería mecánica desde 1848!”. En 1848 Abrió las puertas el joven de 23 años de edad, Louis Brandt en Chaux-de-Fonds un taller para el ensamblaje de relojes. En 1879 sus dos hijos ampliaron el taller a una fábrica. En 1885 se desarrolló el calibre "Labrador" con una variación diaria de menos de 30 segundos, en 1892 llegó el primer reloj con una repetición de un minuto al mercado y en 1932 actuó Omega por primera vez en los Juegos Olímpicos como el cronometrador oficial. Los modelos más populares son: Constellation, Planet Ocean, Speedmaster, Seamaster y De Ville.